Por alguna razón, estaba seguro de que Moontan no era un hard rock básico. ¿Quizás fue por la portada del álbum? Así que estaba más que un poco decepcionado, mientras que me tomó hasta la última pista ("The Vanilla Queen") para encontrar el tipo de enfoque artístico progresivo que estaba buscando. "Radar Love" puede ser un clásico para algunos e incluso había conocido el título de la canción durante décadas, pero juro que esta fue la primera vez que la escuché.
Uno de los mejores discos de todos los tiempos. Este es el período de Miles Davis justo antes de su era de fusión. Aquí ha mezclado elementos de funk y soul y el funky soul en su música. John McLaughlin agrega sorprendentes riffs de guitarra atados sobre un bajo que hace estallar. Si te gusta el jazz, este te gustará. Si te gusta el funk, este te gustará. Si te gusta el rock, este te gustará.
De hecho, es bastante agradable, aunque 13 pistas es un poco demasiado largo cuando tienes un promedio de casi cinco minutos por corte. "What It Is" está entre las mejores canciones aquí, y habría encajado muy bien en un disco de Dire Straits. La mayor parte del álbum es relativamente tranquilo, pero las habilidades de composición de Knopfler son en gran parte evidentes y hay poco de la sensación forzada de algunas de las canciones del último álbum de Dire Straits.
Mi conocimiento sobre Massive Attack y el género que representa no va mucho más allá de los dos álbumes más representativos. "Dummy" de Portishead y "Mezzanine" de esta banda, y aunque era un género de los 90, en 2008 Portishead demostró que este género tenía aún más que dar, mientras lo apuntaba en una nueva dirección. En contraste con seguir el camino marcado por sus hermanos rivales, Massive Attack ha llegado con un álbum muy mediocre.
Moyet realmente lo ha clavado en varias pistas aquí, más notablemente "You Got Me Wrong", "Sleep Like Breathing" y "Blow Wind Blow". Su voz conmovedora está en su mejor momento aquí. Lamentablemente, (para mí) estos son los aspectos más destacados. El resto de este trabajo es sólo un suave pop de los 80. Lo siento, Alison, pero lo es.
Gran disco de hard rock, buenos riffs, buena producción, buena voz. A veces, la letra puede ser mejor. Nada alucinante, solo un lanzamiento muy sólido de músicos experimentados. En estos momentos el hard rock no está de moda, de ahí la baja calificación que recibe este disco, como muchos otros del mismo estilo. No caigas en eso, escúchalo.
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